El exministro y exfuncionario guatemalteco Carlos Velásquez Monge denunció un esquema de persecución política y manipulación judicial, presuntamente ejecutado por la CICIG y el Ministerio Público (MP) durante la administración de la exfiscal general Thelma Aldana.
En una declaración oficial, Velásquez Monge expuso que fiscales como Juan Francisco Sandoval y Estuardo Campo, en coordinación con la CICIG, habrían impulsado investigaciones ilegales y construido una narrativa de corrupción para debilitar al Ejecutivo, con el objetivo de provocar la salida del presidente y vicepresidente de la República.
El exfuncionario asegura que se negó a participar en dicha estrategia y que, como represalia, fue perseguido penalmente. Además, denunció que su madre fue detenida injustamente y posteriormente absuelta, en lo que calificó como una medida de presión personal.
Uno de los casos mencionados se refiere al aeropuerto La Aurora, donde se le acusó de autorizar pagos por servicios que, según él, sí fueron prestados y respaldados por documentación. El proceso fue impulsado por el fiscal Estuardo Campo, actualmente detenido por manipulación de evidencia.
Velásquez Monge advierte que estas acciones formaron parte de un plan estructurado para controlar el poder por vías antidemocráticas, utilizando al sistema de justicia como herramienta de intimidación política.
Finalizó su declaración haciendo un llamado a la defensa del Estado de derecho y a investigar el actuar de las estructuras que operaron bajo el discurso anticorrupción, pero que —a su juicio— buscaron imponer una agenda de control político e ideológico en el país.